contador de visitas gratis para blog

2016-03-08

Tagged Under:

Un día que pasa rápido... y del que pocos se acuerdan

Por: Endroke Arrigorriaga a las: 21:39
  • Comparte el articulo
  •      Algunas de nuestras niñas jugando antes de clase

    En el día internacional de la mujer, desde Endroke, podríamos hacer un alegato sobre como algunas de las pocas jugadoras activas que se ven en nuestra comunidad, como las dos últimas Campeonas de Euskadi por ejemplo, comenzaron en nuestra cantera. 

    Sin embargo, entendemos que este hecho tiene un componente de azar, y está más relacionado con la valía y afición de aquellas dos niñas, que con los actos específicos del club para favorecer su evolución. 

    Es por ello que todos deberíamos cuestionarnos el esfuerzo o la desidia que ponemos a la hora de lograr una integración de la mujer en ajedrez, y preguntarnos si ésta es efectiva o ficticia. 

    Nosotros hemos querido distanciarnos de algunas iniciativas que se anuncian integradoras, pero que en la práctica real evidencian prejuicios adquiridos en su discurrir diario. 

    A modo de reflexión, y para quien quiera oirlo, creemos que no se puede llevar a cabo una integración real sin contar con la propia mujer en el papel más relevante, no como mera comparsa, o teniendo luego que dar explicaciones a otro responsable siempre masculino.

    Por ello, en Endroke hemos incluido a la mujer en la cúspide directiva, en el hacer diario de los monitores, en nuestro nivel deportivo más elevado...  y hemos propuesto en Junta Federativa que se incluya y se valore el plan para la igualdad, dentro de los cursos de formación que se organizan, ya veremos la receptividad que alcanza. 

    Hoy contamos con una paridad de niñas y niños en nuestras clases de iniciación, y estamos seguros que contando con la mujer en la gestión del club, estas niñas tendrán un camino más alisado que la generación anterior para continuar jugando.

    Sin extendernos más, y como vara de medir, podremos hablar de integración real cuando logremos que el niño y la niña que comienzan a jugar, tengan la misma posibilidad de permancer en el mundillo pasado un tiempo.